El paro no sabe ni entiende de brotes verdes en este país.

Al menos 30 sectores continúan creando empleo, a pesar de que las recientes estadísticas de la EPA frustraron la expectativa de que la recuperación económica haya echado raíces en el mercado laboral. La resistencia del sector de agricultura (que lidera la generación de empleo desde finales del año pasado), el incremento de las contrataciones en Educación y Sanidad (buena parte de ellas realizadas por el sector público) y las mejoras en la industria alimentaria, con una capacidad competitiva y de innovación muy reseñables, son algunas de las claves de la creación de empleo en el arranque del año, en el que estas 30 ramas de actividad han aportado 174.000 puestos de trabajo a la economía española en el primer trimestre, según la radiografía del mercado laboral que hoy publica el diario Expansión. 

Pica para ampliar.

La profunda transformación de la industria alimentaria podría ser el espejo en el que mirarse el conjunto del sector industrial, sin cuyo concurso será muy difícil que la economía española pueda enjugar en un periodo de tiempo razonable la enorme cantidad de desempleados actuales: 5,93 millones. Pese a la mejora en el mercado laboral en los últimos meses, ésta no se aprecia por igual en todos los sectores ni provincias. Una realidad que se debe a la acusada fragmentación del empleo en España. Déficits históricos como la escasísima movilidad geográfica y sectorial, el retraso en la necesaria reconversión de los sectores que han dejado de ser intensivos en mano de obra o la rigidez de las relaciones laborales a pesar de los cambios introducidos por la última reforma del mercado de trabajo explican que medio país esté ya inmerso en una importante recuperación del empleo, mientras que la otra mitad aún sufre altísimos niveles de paro y una muy débil creación de nuevos puestos. 

La última EPA reveló una destrucción de 184.600 empleos en el primer trimestre del año, que aunque fue mínima en términos estadísticos, al suponer un descenso interanual del 0,47%, revela el trecho que aún debe recorrer España para superar los daños de la crisis. Todavía 55 sectores destruyen empleo. Junto a la construcción –la industria más impactada–, el comercio, la hostelería y la industria manufacturera son los sectores donde se concentra la mayor pérdida de puestos de trabajo. Por otro lado, el enorme volumen de parados por cada vacante (110 aspirantes de media, aunque en algunos sectores es muy inferior) indica que hay que mejorar la empleabilidad de la población con situación más alarmante, principalmente jóvenes y parados de larga duración.