Bruselas se come los brotes verdes de Rajoy de una tremenda dentellada.

La Comisión Europea advirtió ayer de que el horizonte de la economía española está plagado de minas ocultas, que sufre desequilibrios económicos “excesivos” y que hay riesgos de que la recuperación del PIB no empiece a finales de 2013, tal como auguró el ministro de Economía Luis de Guindos. En su lugar, el Ejecutivo comunitario ve riesgos de que la recesión se extienda hasta los primeros trimestres de 2014. Así lo expone un documento de trabajo publicado ayer por la Dirección General de Asuntos Económicos de la Comisión.

Según la tesis del Ejecutivo comunitario, el desapalancamiento del sector privado está debilitando la demanda interna y ha provocado una doble recesión que se inició a finales de 2011 y “podría extenderse hasta entrado 2014”. Pese a esta afirmación, Bruselas estima en su escenario base que el PIB español crecerá el año que viene un 0,8% tras la caída del 1,4% de este ejercicio.

El documento de trabajo publicado ayer acompaña la comunicación que la Comisión Europea remitirá al Ecofin (ministros de Economía y Finanzas de la UE) y al Parlamento Europeo, dentro del Procedimiento de Desequilibrios Macroeconómicos (PDM), un programa encaminado a corregir riesgos (reales o latentes) de las economías europeas. El mecanismo de alerta de PDM mostró en noviembre pasado que España incumplió en 2011 seis de once indicadores económicos (desempleo, exportaciones, deuda privada, deuda pública, inversión internacional, déficit por cuenta corriente).

Lo que ayer presentó la Comisión es el análisis en profundidad sobre las causas de esos riesgos, junto con el de otros doce países de la UE. Y aunque Bruselas reconoció cierta mejora en algunos de esos indicadores desde la situación de 2011 (déficit por cuenta corriente, sobre todo), aseguró que los desequilibrios de la economía española “pueden ser considerados excesivos”.

El Ejecutivo comunitario también situó en la misma cesta a Eslovenia, uno de los candidatos a pedir un rescate completo, lo que deja a ambos países a un paso de un proceso que podría concluir con sanciones económicas.

Olli Rehn

Olli Rehn, comisario de Asuntos Económicos y Monetarios de la UE, emplazó al Gobierno de Mariano Rajoy a presentar un plan para corregir esos desequilibrios. En principio, la respuesta del Ejecutivo español llegará el 26 de abril, cuando el presidente del Gobierno presentará un paquete de reformas.

Según Rehn, es muy importante que España “mantenga el momentum de las reformas” y recordó que estas son una parte “muy sustancial” del debate a la hora de decidir cuánto se flexibiliza el objetivo de déficit de España, algo que la Comisión está analizando en estos momentos. Además, el documento de trabajo presentado ayer por la Comisión, culpa a la lentitud del Gobierno a la hora de aprobar e implementar algunas reformas de parte del incremento del desempleo.

Una vez presentado el paquete reformista, la Comisión Europea las analizará y decidirá si son suficientes para mitigar esos riesgos. En caso contrario, Bruselas podría considerar incluir a España (y a Eslovenia) en el Procedimiento de Desequilibrios Excesivos, que obliga a los países a fijar un plan todavía más detallado para corregir esos desequilibrios. En última instancia, ese procedimiento podría concluir con una sanción del 0,1% del PIB del país en cuestión. En el caso de España, esa posible sanción rondaría los 1.000 millones de euros.