La zona € peligra, Finlandia y Austria sacan la tarjeta roja a los PIIGS.

Nuevo toque de atención para la zona euro, que se enfrenta a partir de septiembre a su momento más decisivo. Aunque en las últimas semanas la prima de riesgo de países periféricos como España e Italia se mantienen controlada, las declaraciones del ministro de Exteriores Finlandés han vuelto a recordar los graves desafíos a los que se enfrenta la moneda única. El dirigente finlandés, Erkki Tuomioja, avisó ayer de que su Gobierno ya tiene preparado un plan de contingencia ante la posibilidad de que se rompa la moneda única.

Su mensaje es contundente. Avisó en una entrevista publicada en el diario británico The Daily Telegraph de que "necesitamos enfrentarnos abiertamente a la posibilidad de una ruptura del euro". "Esto es lo que está pensando la gente en todo el mundo", remachó. Tuomioja fue taxativo: "Nuestros funcionarios tienen una especie de plan operativo para cualquier eventualidad", señaló. Tras la polémica generada, aclaró horas después que su país no es partidario de suprimir el euro, aunque insistió en que sería "irresponsable" no estar preparado para la desaparición de la moneda única. "Simplemente constaté una evidencia. En una situación incierta, todo el mundo en los ministerios especula sobre la posibilidad de que desaparezca el euro", destacó.

De hecho, Finlandia cree que la salida de Grecia del euro podría ser una noticia buena para la Unión Europea, en contra del mensaje oficial que están repitiendo constantemente los dirigentes de la Comisión Europea y mandatarios europeos de distinta ideología como Angela Merkel, François Hollande o Mariano Rajoy. Aunque advirtió que "compete a los griegos decidir si quieren quedarse en el euro", insinuó que "podría hacer que la UE funcionara mejor". "Podemos cortar la financiación y eso llevaría a la quiebra. Entonces podríamos especular si ello implicaría la salida del euro. Nadie sabe si esto podría contenerse", advirtió.

Pero esta declaración, aunque es la más llamativa, no es la única que puede hacer tambalear los cimientos de la moneda única. El jefe de la diplomacia finlandesa también puso una "linea roja" encima de la mesa que afecta directamente a la economía española y a las opciones que manejan Rajoy para salir airoso de la tormenta de la deuda que lleva meses castigando a la UE.

Tuomioja dejó claro en la entrevista que bloqueará cualquier intento de retirar el estatus preferente del Mecanismo Europeo de Estabilidad Financiera (MEDE) para cobrar antes que otros acreedores en caso de quiebra del país que reciba las ayudas. "Los prestamos del MEDE tienen prioridad. Esta es una línea roja para nosotros. Estamos muy preocupados por las normas del MEDE que parecen estar cambiando", explicó.

España se verá muy afectada si Finlandia gana la partida sobre este asunto. Si el fondo de rescate no deja de tener preferencia para cobrar en el hipotético caso de suspensión de pagos de un país, economías como la italiana y la española se verán severamente castigadas si piden ayuda al MEDE para financiarse. La situación de España e Italia no es tan grave como la de Grecia (ambos países no necesitan un salvamento total para su deuda), pero sí podría requerir ayuda puntual de la UE. Sin embargo, si piden dinero a un fondo que tiene preferencia para cobrar se estigmatizaría la deuda de España e Italia en los mercados financieros, con el considerable aumento de los costes de financiación.

Las declaraciones del ministro de Asuntos Exteriores de Finlandia provocaron una guerra política dentro del Gobierno del país. El ministro de Asuntos Europeos de Finlandia, Alexander Stubb, aseguró ayer a la agencia Reuters que el país está "cien por cien comprometido con el euro", en respuesta a la declaraciones del titular de Asuntos Exteriores. "Quiero dejar claro que la especulación del ministro de Exteriores no refleja la posición del Gobierno", dijo.

Ante las incendiarias declaraciones sobre el futuro de la UE, la Comisión Europea también tuvo que salir ayer a la palestra para recordarle a los halcones del euro el compromiso que adquirió con la eurozona. El portavoz del Ejecutivo comunitario, Olivier Bailly, recordó a a Finlandia "el firme compromiso de todos los líderes" para hacer "todo lo que sea necesario para preservar la integridad de la Eurozona. Y dejó claro que el Ejecutivo comunitario no ha elaborado ningún plan de contingencia ante los rumores de una posible salida de Grecia del euro. "Creemos que el euro es irreversible", remarcó.

Y Austria plantea que se pueda echar a países de la eurozona...

Michael Spindelegger

El ministro austríaco de Exteriores, Michael Spindelegger, aboga por normas que permitan excluir del euro a un miembro y estimó que se requerirían unos cinco años para adoptarlas, opción que, no obstante rechaza en público el jefe de su Gobierno, Werner Faymann. El ministro austríaco aseguró en una entrevista que ya ha hablado de este tema con sus colegas de la UE y que países con una economía sólida, como Alemania, Luxemburgo, Holanda o Finlandia estarían a favor, pero reconoció que la modificación requeriría el consenso de todos los miembros.