Según el Instituto de Estudios Económicos Cataluña sería uno de los estados más pobres de Europa en caso de secesión.
Un documento del Instituto de Estudios Económicos (IEE) hecho público hoy considera que el empleo catalán descendería hasta un 25% y Credit Suisse augura una caída del PIB del 20%.
Cataluña tiene en el resto de España su principal mercado comercial, al que sus empresas venden por valor de unos 50.000 millones de euros anuales. La secesión que promueve el presidente catalán, Artur Mas, conllevaría un cerrojazo de este destino muy considerable, y que podría hacer caer estas exportaciones a la mitad. Ello implicaría una caída de la facturación de 25.000 millones.
Este importante descenso vendría provocado, no tanto por un posible boicot (que podría todavía agrandar el problema) sino por la creación de un efecto frontera, derivado de levantar una barrera con España y con Europa (Cataluña se encontraría fuera de la UE). Así lo consideran los informes recogidos en el documento La cuestión catalana, hoy, elaborado por el Instituto de Estudios Económicos(IEE), el think tank de la patronal CEOE. Cataluña perdería un 25% del empleo en los sectores agrícolas e industriales, y el 20% en el ramo de los servicios. "Eso en un escenario más bien optimista", señala el catedrático de Fundamentos de Análisis Económico de la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB), Clemente Polo. Esto podría conllevar que la tasa de paro escalara hasta un 35%, frente al 23% actual.
Este descenso de la actividad implicaría, hoy en día (cuando el mercado laboral está ya muy deteriorado), la pérdida de casi 500.000 puestos de trabajo adicionales. Polo echa mano de la relación comercial de Cataluña con Francia. El país vecino compró a la comunidad autónoma por 9.285 millones, una quinta parte que España, pese a formar parte de la Unión Europea también y compartir frontera con Cataluña. "Lo anormal es la intensidad de las exportaciones al resto de España y, si tomamos las exportaciones a Francia como punto de referencia, la reducción del 50% de las exportaciones al resto de España resulta ser una hipótesis más bien conservadora", reza el documento.
A estos datos cabe añadir un informe publicado ayer por la entidad de inversión Credit Suisse, que cifra la caída de PIB de una Cataluña independiente en torno al 20%. El impacto también sería negativo en España, aunque "el meteorito caería en Cataluña", dijo el presidente del IEE, José Luis Feito.
Existen otros elementos que perjudicarían a la economía catalana. En primer lugar, debería asumir un volumen de deuda del Estado de unos 180.000 millones de euros, según el catedrático de Economía Aplicada de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM) Donato Fernández Navarrete, quien además cifró el efecto frontera como "muy perjudicial", con la pérdida de 42.000 millones de euros para Cataluña en el primer año de independencia.
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