Se prevé un órdago en el Parlament hacia la unidad nacional...

El Parlament de Cataluña vivirá a partir de mañana una de sus semanas más intensas de los últimos años. El debate de política general -el equivalente al debate sobre el estado de la nación-, además de aclarar si la comunidad se dirige de nuevo hacia las urnas, servirá para aprobar una moción favorable al derecho a la autodeterminación. Será la reacción al fracaso de la reunión entre los presidentes Mariano Rajoy y Artur Mas del 20 de septiembre a cuenta del pacto fiscal y tras la manifestación independentista de la Diada.

CiU, ICV, Esquerra y Solidaritat (SI) están preparando una resolución conjunta. Aunque el texto todavía no está redactado, sí que existe la "intención" de consensuar un pronunciamiento que asuma el mensaje independentista que corearon unas 600.000 personas en Barcelona la pasada Diada.

En esta ocasión, el recurso a la autodeterminación no sería genérico, sino que evocaría la voluntad del Parlament de que haya una votación sobre la relación entre España y Cataluña, o sea, la convocatoria de un referéndum o una consulta popular.

El debate político en Cataluña ha virado de discutir sobre los recortes y la petición al Estado de un rescate de 5.023 millones de euros, a la cuestión nacional. Los cuatro partidos que impulsarán la moción suman 85 de los 135 escaños de la cámara catalana. En el otro lado se sitúan el PSC y el PP.

El primer secretario de los socialistas catalanes, Pere Navarro, rechazó cualquier pacto con los populares para detener el auge del independentismo, a diferencia de lo que sucedió en el País Vasco. "Entre el PP y el PSC hay más diferencias que entre el PP y CiU", subrayó Navarro, partidario de una España federal.

Por su parte, la presidenta del Partido Popular catalán, Alicia Sánchez-Camacho, advirtió ayer a Artur Mas de que no volverá a votarle otros Presupuestos si no cambia su discurso. "Con una CiU que quiere romper con el resto de España no hay nada que negociar", declaró la dirigente popular a Europa Press. A pesar de su discurso netamente contrario a la independencia, el PP ha sido el único partido que ha permitido aprobar, gracias a su abstención, los dos presupuestos de Mas. Si no se adelantan las elecciones, durante las próximas semanas se deberían negociar las cuentas públicas catalanas para 2013.