Año nuevo, ¿vida nueva?
Se fue el fatídico 2012 y entró el 2013 en una de las navidades más apagadas y tristes que he conocido en este país. Sin embargo, hay datos en la economía española que dan pie a la esperanza como nunca antes se habían producido en esta crisis que nos asola.
Sí, con el 2013 han llegado brotes verdes pero de los de verdad, no humo vendido por políticos. Los datos de desempleo de diciembre, contra pronóstico ya que el consumo se ha desplomado y todos pensábamos que lastraría a la contratación, han sido excepcionales... los mejores de toda la serie histórica cuando nos referimos a diciembre. El mayor banco de inversión del mundo, el estadounidense Morgan Stanley, sitúa a España como el segundo país más propicio para invertir. Las grandes compañías de automóviles vuelven a mirar hacia España a la hora de localizar su producción. El temido dato del déficit va a rozar el objetivo cuando se daba por hecho que sería inalcanzable por mucho. Por segundo mes consecutivo -diciembre- en España entraron más depósitos bancarios que salieron, la prima de riesgo se ha relajado y los exigentes mercados centran sus dudas y sospechas sobre otros países (sobretodo Francia y EEUU) y libera a los periféricos del estrangulamiento al que los tenían sometidos...
Son datos que ciertamente invitan al optimismo. Si no fuese porque, en el otro lado de la balanza, volvieron a contrarrestar las alegrías las típicas fatalidades que acompañan a nuestra economía desde hace muchos años. 7 penalidades en forma de comunidades autónomas que van a incumplir el déficit poniendo en peligro el objetivo global de las administraciones del país. Otra pena que De Guindos adelantó al dar por sentado un desplome del PIB en el 4º trimestre del 2012 por la fuerte caída del consumo. Los típicos casos de corrupción que siguen salpicando, día sí y día también, la actualidad española con la incertidumbre y desconfianza que ello conlleva a la economía. La altísima y desbocada tasa de morosidad que amenaza con colapsar la economía nacional de seguir así. El déficit de tarifa de las energéticas que han puesto el precio de la luz por la nubes y no se termina de dar en la tecla para solucionarla de una vez por todas. La subida de los carburantes por la nueva imposición que los grava...
Como veis, el año se presenta muy interesante, pero no tan trágico como estos años pasados de crisis. Habrá que estar pendiente de las primeras reválidas importantes para nuestra economía, que sin lugar a dudas son la reforma del sistema de pensiones y la revisión de la ejecución de los presupuestos generales del estado por parte de Bruselas en febrero entre otras. Yo estaré aquí, otro año más, para compartir con todos ustedes lo que suceda.
y komo explikas esto seneka?
ResponderEliminarhttp://www.elmundo.es/elmundo/2013/01/03/economia/1357202260.html
brote verde de diciembre
No necesito "explikartelo" querido lector, lee el artículo y el mismo te desvelará que durante diciembre se les acabó la mamandurria sociata a los "listos" que estaban cotizando para obtener una pensión contributiva por cuidar a sus mayores, sin sueldo ni nada... en total son más de 63.000 cuidadores "no profesionales" los que han dejado de maquillar las cifras de la SSGG.
ResponderEliminarEso sí, soy muy cauto con el brote verde del dato del empleo en diciembre. El último mes del año suele ser propicio para un tipo de empleo demasiado estacional, precario dada su fugaz temporalidad. Habrá que ir viendo la evolución de los datos en enero, febrero y marzo y compararlos en la serie histórica para deducir si estamos ante un cambio de ciclo real o no.