Las cosas se complican por momentos. Finlandia y Holanda nos vetan y Bruselas se muestra poco receptiva.

Los halcones del € no ceden en sus políticas frente a las peticiones mediterráneas. Finlandia y Holanda se muestran muy reticentes para aceptar el rescate financiero español tal como se planteó en Bruselas en la pasada Eurocumbre.

La rubia Ministra de Finanzas finesa, Jutta Urpilainen, se ha destapado como el principal paladín de "la línea dura del €".

Y es que ambos países se han autoproclamado como "la línea dura del €" (palabras de la Ministra de Finanzas finesa). Los finlandeses quieren que España, como estado soberano, avale el primer tramo del rescate financiero a la banca española. Holanda, por su parte, propone que el rescate de la banca española sea tratado y debatido en el parlamento holandés, haciendo eterno un proceso que le urge a corto plazo a la banca española.

Finlandia se ha enconado tanto en su postura que esta misma tarde ha lanzado una advertencia de abandonar el € si se persiste con políticas como el rescate financiero español tal como salió planteado en la "hoja de ruta" aprobada en la reciente Eurocumbre. La "victoria" de Rajoy y Monti sobre la Merkel en dicha Eurocumbre de Bruselas se disuelve como azucarillo en agua con el paso de los días... y el tiempo apremia. España no puede seguir financiándose a los tipos que lucen en la actualidad para con su deuda y la prima de riesgo galopa desbocada hacia nuevos records.

Monti y Rajoy están en graves apuros. El presidente italiano ha reaccionado con mucha agilidad ante los acontecimientos con un "recortazo" de aúpa... pero la factura se la van a pasar a nivel casero los sindicatos con una más que posible huelga general. Rajoy está agotando todas las opciones en Bruselas ante de proceder con las tijeras.

Italia, por su parte, ha cogido el toro por los cuernos y ha anunciado un "recortazo" en su sistemas educativo, sanitario y en el número de provincias italianas, que de 110 pasarán a ser 55. Unos recortes que suponen un ahorro de unos 25.000 millones de € en dos años y medio y que, a parte de calmar a los mercados, tienen como objetivo el evitar la subida del IVA dos puntos en el país transalpino. Eso sí, los sindicatos italianos han tardado muy poco en reaccionar amenazando con convocar una huelga general, en contra de estas medidas de recortes en el gasto público, en los próximos días.

Por si fuese poco para el atosigado ejecutivo de Mariano Rajoy, Bruselas ya ha advertido a España que tendrá que asumir las pérdidas de la recapitalización directa de bancos españoles si no puede posponerla hasta otoño (fecha en la que se pondría en marcha la figura del supervisor único y España evitaría avalar dichas ayudas como estado). La cuestión es saber cuanto podrán aguantar las entidades en peor estado de liquidez (básicamente las intervenidas por el Estado) sin la recapitalización solicitada formalmente por escrito hace unos 15 días.

Pasado los días, uno va advirtiendo que la Eurocumbre fue un fiasco completo visto el desarrollo de los acontecimientos. De no mediar cambio importante en las posturas de los dos bandos ahora mismo claramente enfrentados en la zona €, los halcones (Alemania, Holanda y Finlandia. Los más poderosos económicamente hablando) y la opción Mediterránea (Italia y España con el apoyo velado de Francia), las turbulencias serán tremendas en agosto... y la capacidad de reacción ante tales turbulencias mínias. Apunten ustedes agosto como el mes en que quebró la economía española en sus quinielas. La apuesta tiene visos sólidos para salir premiada en los boletos expedidos por los mercados.